Vivimos en una sociedad acelerada, donde ya no nos detenemos a admirar el arte en general. No podemos detenernos a valorar todo el proceso que lleva detrás pintar un cuadro, pintar un fotograma con luz o escribir en un libro en blanco. 

La sociedad actual nos conduce a ignorar y abandonar ese lado del cerebro más irracional, nuestro lado derecho creativo, para hacer uso sólo  del lado racional. Nos obliga a la rutina, al consumismo, a una vida “decente y correcta", porque se supone que este tipo de vida nos generará felicidad en un futuro y seremos socialmente aceptados.

Pero, este tipo de vida nos proporciona realmente Felicidad? Qué pasa con nuestro yo interior? Realmente ese tipo de vida “correcta” nos proporciona esa plenitud? No sería más completa la felicidad teniendo ambos hemisferios al 50%? . 

Cuando somos niños soñamos, jugamos, creamos nos divertimos. Nos genera una autoestima y un crecimiento emocional muy importante para nuestro desarrollo personal. Por que eliminarlo de adultos? No seríamos más felices saliendo de las rutinas y dando que alimentar un poco a nuestro lado creativo?. 

Por otra parte, vivimos deprisa entre una avalancha de información, imágenes, documentos, pantallas, etc y ese ritmo de vida no nos permite alimentar al lado derecho del cerebro, simplemente dedicando tiempo a la lectura, a admirar un cuadro o la belleza de una simple flor. Este lado creativo nos conduce a nuestra energía interior, a proporcionarnos una felicidad plena, admirando lo que somos capaces de crear con nuestra mente y con nuestras manos. 

Mantengamos activo nuestro lado creativo, solo así experimentaremos la Felicidad plena.  

La Creatividad es una energía que poseemos innata desde que nacemos. Es nuestra capacidad de crear jugando, investigando y de soñar despiertos. Todo el mundo que conocemos es creatividad, ha sido creado de la nada, por eso poseemos esa capacidad y nos conectamos con la naturaleza.

Este proyecto tiene ese mensaje de trasfondo. 

Una mujer joven pasea por los pasillos de un museo con una tablet en la mano, concentrada en su vida rutinaria. De repente, le llama la atención un cuadro en blanco, sin vida ( al igual que el jarrón de flores que tiene al lado ). Se detiene frente a el y sueña con ser la protagonista de ese cuadro. De joven, amaba el arte, incluso pintaba sus propias obras. Siente que ese cuadro vacío le llama, introduciéndose dentro de él, y regando con su creatividad consigue dar vida a ese cuadro inerte y al jarrón de flores que tiene al lado.  Vuelve a conectar con su lado creativo y llena de plenitud su alma y ese pasillo del museo sin vida. 

Inspirado en la frase "Sueño mis pinturas y luego pinto un sueño" de Vicent Van Gogh. Bang y en la obra de Klimt, en concreto,  "La Dama de Oro",  retrato de Adele Bloch-Bauer por la semejanza de la modelo elegida y por ser una representación del arte moderno. 

Modelo: Sandra Lucioni @oxys_gen

Escenografía y Atrezo: Gustavo Girón @guscosplay74

Makeup: Patricia Ramos @makepat

Dirección de Arte, Fotografía y Edición: Yolanda Garcia @yolandagarciafoto